Como los espejos, algunas percepciones que tenemos de nosotros mismos pueden estar distorsionadas, y nos vemos más pequeños de lo que somos, más torpes, fracasados, o tontos de lo que en verdad somos. Otros, por el contrario, pueden necesitar verse más superiores, bellos o fuertes de lo que son con el propósito de ocultar, protegerse o evadir quiénes son.
En esta primera sesión, Sixto Porras nos hará reflexionar en la importancia de nuestra autoimagen y su relación con nuestro propósito, nuestras relaciones, y la forma en la que nos relacionamos con el Creador.