Selah nunca conoció a su madre. Nunca ha sabido lo que es ir a la escuela o ver una película o jugar en un patio de recreo. Todo lo que sabe es todo lo que ha conocido: las hermanas. Las madres. Las ovejas. El pastor.
Ella sabe que el Pastor es su padre, por supuesto. En cierto modo, como líder de su pequeño rebaño, él es el padre de todos, ya sea espiritualmente o, en su caso, literalmente. Él es el padre de todo lo bueno. Y en gratitud, deber y amor, lo alimentan. Lo chinean. Cuando el Pastor llama a una de sus esposas, vienen sin dudarlo. Y cuando las niñas y las mujeres se acuestan por la noche, le rezan.
Ven a mí y lléname de ti mismo. Ayúdame a sentirme más cerca de ti.
A veces, predica, cortando la garganta de un cordero como prefacio, derramando la sangre cálida y rica en una taza.
“He recibido a cada uno de ustedes”, dice. “Te he protegido. Sacrifiqué mi vida por ti. Te di refugio, te di hijas y hermandad. Y vida.” Y luego, mientras las mujeres y las niñas cantan, rezan y suplican, el Pastor les mancha la cara con la sangre del cordero, tal vez una bendición. Y aquellas a quienes no les mancha la cara sienten la falta de la gracia del Pastor.
Selah, todavía una niña, siempre ha sentido la gracia y el amor de su padre. “Qué hermosa”, dice el Pastor mientras le acaricia la mejilla y juega con su cabello. “Al igual que tu madre”. Ella también lo ama. Ella cree en él. Para ella, este es su hogar. Las hijas vestidas de azul del Pastor son sus hermanas, sus esposas vestidas de morado son sus madres … incluso si algunas de esas madres tienen la misma edad que ella.
Pero entonces, un día, el día después de que el Pastor recibe una misteriosa visita de un hombre extraño, conduciendo un vehículo con luces rojas y azules en el techo, el Pastor anuncia que deben abandonar su hogar en el bosque para avanzar hacia otro tierra prometida. De lo contrario, advierte: “El mundo exterior nos destruirá a todos y las alejará de mí”.
Y así comienzan un viaje a través del bosque y páramo azotado por el viento, en busca de otro hogar, lejos de un mundo que el Pastor les dice que está quebrado y lleno de cosas rotas. Solo en su familia las cosas son perfectas: son cómo dios, cómo el Pastor las diseñó para ser. El es de ellas. Ellas son suyas.
Y las usará como quiera.
Elementos Positivos
Obviamente estamos hablando de una secta aquí, y una que parece bastante complicada incluso para los estándares de secta. Pero también encontramos cierto afecto aquí.
Si bien vemos indicios de rivalidad entre las esposas y las hijas, muchas se preocupan profundamente y, a veces, ferozmente entre ellas. Por ejemplo, vemos a Selah y a una niña llamada Tamar compartiendo como mejores amigas y, a veces, en cualquier lugar. Muchas de las hijas más jóvenes de Shepherd admiran a Selah.
Mientras tanto, Selah finalmente encuentra a su propia mujer a quien admirar: la “esposa maldita” que vive en una cabaña y se preocupa por las mujeres que menstrúan. (La menstruación, en la teología del culto, es un castigo a las mujeres, que representa el pecado de Eva y la falta de fe por parte de la mujer que experimenta su período.) La esposa maldita, uno de los primeros miembros de la secta ( junto con la madre de Selah) le da a Selah una idea de cuán desordenado es realmente este entorno. Y cuando el Pastor quiere matar a un bebé, decide tomarlo y abandonar la secta, a pesar de que está aterrorizada por el mundo exterior.
“Eres tan fuerte”, le dice a Selah. “Prométeme que lo recordarás. Y ayuda a tus hermanas a recordar también. Y aunque las formas en que esta fuerza finalmente se manifiesta también es problemática, el sentimiento es exacto.
Contenido Espiritual
La secta, aunque obviamente no es cristiana, ciertamente sigue algunas cosas de la tradición judeocristiana. El Pastor claramente quiere que sus seguidores piensen en él como una figura parecida a Cristo, y se refiere al lugar al que están viajando como un nuevo Edén. El hecho de que el Pastor sacrifique corderos, aunque es claramente una idea extraída de la Escritura (aunque otras religiones también sacrificaron corderos), parece tener la intención de enfatizar su poder sobre su propio rebaño en lugar de cualquier tipo de ofrenda de limpieza.
El tener sexo con el Pastor adquiere el carácter de un rito solemne … al menos en cómo las mujeres hablan de eso después. “Simplemente me decía:” Eres perfecta y eres aceptada””, le dice una mujer a Selah. “En ese momento todo fue perfecto. Y sabía que nunca quería irme “.
Escuchamos a las mujeres cantar un himno tradicional estadounidense durante un funeral. Como se mencionó, las mujeres y las niñas parecen rezarle al Pastor, agradeciéndole, entre otras cosas, su “gracia” y “amor” y por el “hermoso día” que tuvieron.
El Pastor bautiza a las mujeres y las niñas en un lago, al parecer un acto de limpieza (una dice “Me siento diferente” después de la ceremonia), pero también como otra forma de enfatizar su poder sobre ellas. (Sostiene a algunas de las chicas debajo del agua por más tiempo que otras, lo que muestra cuán dependientes de su “gracia” son todas).
[Advertencia de Spoiler] Los bautismos del Pastor, al final, llevan el simbolismo de “muerte a una nueva vida” en una dirección horrible. Él ahoga a todas sus esposas actuales (fuera de cámara) en un acto que caracteriza para sus hijas como un “milagro”, diciendo que fueron a buscar una nueva vida en otro lugar. Ahora que sus esposas actuales están muertas, sus hijas, son libres de convertirse en sus esposas.
Contenido Sexual
El Pastor basa su secta en la poligamia y el incesto. Y si alguien tiene un problema, no se atreven a hablar. Vemos claramente, desde las primeras etapas de la película, que Shepherd se siente atraído por Selah, incluso antes de que comience a menstruar. Selah sabe que una vez que comiencen sus períodos mentruales, el Pastor podría y probablemente dará el siguiente paso con ella. Mientras Selah se refugia con la esposa maldita, Sarah, durante su primer período, la niña parece atrasarse voluntariamente después de que su menstruación se detiene, temiendo lo que podría estar esperándola cuando se una a la comunidad en general.
“Sabes que no puedes quedarte aquí conmigo para siempre”, le dice Sarah. “El cuenta los días. Él conoce nuestros ritmos privados “.
Vemos que el Pastor se involucra en actos sexuales con varias niñas y mujeres. A veces vemos actos de juego previo a través de los ojos de Selah, mientras ella lo espía a él y a su amante actual. (A menudo él le devuelve la mirada.) Los actos en sí mismos suelen ser rápidos e inquietantes, incluida la repetida actuación de amordazar a las mujeres poniendo los dedos en sus bocas durante las relaciones sexuales.
Vemos escenas de una mujer desnuda junto a una cascada, y es visible desde el frente, los costados y la espalda. En la secuencia del bautismo, las mujeres visten prendas blancas que, cuando están mojadas, no dejan nada a la imaginación.
Contenido Violento
Tenemos algunos actos de violencia difíciles de los cuales hablar, pero nos dan luz sobre algunas cosas, y trasladaremos detrás de una advertencia de spoiler. Mientras tanto, todavía tenemos mucho de qué hablar.
Selah es asignado para vigilar a las ovejas mientras dan a luz. Una de las ovejas da a luz un cordero sin lana o, posiblemente, sin piel. Todavía está vivo e intenta levantar la cabeza. Más tarde, nos enteramos (y vemos) que Selah lo mata con un cuchillo y le salpica sangre en la cara. (Vemos el cordero deforme varias veces en los propios recuerdos y sueños de Selah.) Luego miente y dice que un “perro salvaje” lo mató).
El Pastor patea repetidamente a una de sus hijas, luego la abofetea dos veces en la cara. “Sin valor”, dice, mientras la arrastra físicamente a través de un suelo lleno de raíces y piedras. Una mujer da a luz, pero ella muere en el proceso. Su cuerpo está tendido sobre una pira funeraria, y el Pastor jala bruscamente a la otra hija de la mujer del cuerpo y casi arroja a la niña hacia las otras mujeres. (Vemos la pira incendiada, pero no antes de que una de las mujeres culpe al Pastor, usando su nombre de pila la única vez que lo escuchamos en la película, por su muerte).
Nos enteramos de que la madre de Selah no murió en el parto, como siempre se le había dicho a Selah, sino por infección varios días después. (El Pastor se negó a llevarla al hospital, llamando a la infección una prueba espiritual.) Una mujer da voz oscura a una verdad mayormente tácita: el rebaño del Pastor está completamente desprovisto de niños. “Solo un cordero en el rebaño, niño”, dice ella, sugiriendo que cualquier otro niño macho fue abandonado o muerto. Vemos varias escenas que involucran la sangre menstrual de Selah, que parece (según el contexto) enfatizar el paso a ser mujer o la violencia por venir.
Un cordero muerto yace junto a un cuenco lleno de sangre. El pastor corta la garganta de un cordero ante la cámara. Los cadáveres de ovejas desollados cuelgan de un edificio. Selah ve un pájaro muerto cuyo cuerpo se retuerce con gusanos. Vemos varias imágenes de mujeres bajo el agua, etéreas e inquietantes en igual medida. Pero se vuelve mucho más inquietante una vez que entendemos el contexto completo.
[Advertencia de Spoiler] Como mencioné anteriormente, el Pastor ahoga a sus esposas. Vemos sus vestidos morados esparcidos por el borde del agua del lago (donde se realizó el hecho) y vemos un aparente retroceso a una mujer que lucha con el Pastor bajo el agua mientras un cadáver de otra mujer flota sobre ellos. Más tarde, los cuerpos de las mujeres se encuentran en un pantano.
Eso demuestra ser el colmo. También abofetea a otra mujer, que luego lo abofetea a el. Mientras que la película hace malabares con la cronología, el Pastor es atacado por sus hijas (su cara y las de ellas están ensangrentadas, haciendo eco del rito mencionado en el contenido espiritual), y una parece morderle la oreja, (la cual escupe.) Aparentemente, su cabeza es aplastada por una roca.
Más tarde, la policía encuentra su cuerpo desnudo y ensangrentado atado a dos árboles. (La escena es corta y muy lejana, por lo que no ves nada crítico).
Lenguaje Vulgar
Una palabra f en inglés y una palabra mierd-.
Contenido con Alcohol o Drogas
Ninguno
Conclusión
Esta cinta está clasificada como una película de terror. Pero esto es muy diferente de la típica película de terror llena de fantasmas o asesinos en serie, donde los miembros de la audiencia gritan: “¡No entren allí!” Parece que se debe tratar como arte, no como entretenimiento; y como tal, quizás el director polaco Malgorzata Szumowska está alentando a los espectadores a ver la película como una crítica al patriarcado cultural o al control religioso.
Pero si bien Szumowska podría pensar que la película es arte o una declaración cultural o algo así, el producto final se queda corto, y la crítica que se nos hace es turbia. No es considerada ser una película importante. No es lo suficientemente aterradora como para ser una película de miedo. Lo que termina siendo es una cinta sangrienta, sentimentaloide y sexualizada, que se queda corta en todos los frentes.
No creo que necesite contar los innumerables problemas de la película aquí: la desnudez, la sangre, el incesto, la oveja muerta. Si bien no carece de algún mérito estético, tropieza con sus propias entrañas a medida que se desploma. Sé que todos estamos buscando algo nuevo que ver durante este momento extraño y aterrador. Pero cuando se trata de esta película, recomendaría cambiar de dirección.
