Si está a favor del sexo prematrimonial (o en contra) pero no está seguro de por qué, aquí tiene 3 argumentos que debe reconsiderar.
Cuando Cindy conoció a Rob supo que, aunque él asistía a la Iglesia, no compartía sus convicciones acerca del sexo prematrimonial. Rob pensaba que estaba bien, e incluso que era bueno para las parejas de novios, y Cindy creía que estaba mal desde una perspectiva cristiana.
A medida que su amistad avanzaba, estos opuestos puntos de vista entre Cindy y Rob causaron grandes debates, y también les hizo reconsiderar sus convicciones. Como resultado, Cindy desarrolló un entendimiento profundo de la verdad, y Rob tuvo que enfrentar las mentiras que siempre había creído.
Si su caso es el de Cindy o Rob, y tiene una postura a favor (o en contra) del sexo prematrimoniales, pero no está seguro de por qué, aquí tiene algunos aspectos a considerar.
¿Las Escrituras son obsoletas con respecto al sexo prematrimonial?
Como muchos solteros, Rob pensaba que los versículos referentes a la pureza sexual eran anticuados y obsoletos. “Esas partes de la Biblia no son relevantes en la actualidad,” le dijo a Cindy. “Después de todo, en la época en que la Biblia fue escrita las personas se casaban cuando eran adolescentes; así que ellos no tenían que batallar con la tentación sexual como nosotros en la actualidad”.
En respuesta al argumento de Rob, Cindy encontró algunos versículos referentes a la pureza sexual y se los mostró a Rob. Cuando Cindy citó 1 Corintios 6:9, 2 Corintios 12:21, Gálatas 5:19, Hebreos 13:4 y Deuteronomio 22:13:28, en los que se condena el sexo antes del matrimonio, ella le preguntó a Rob. “¿son relevantes estos versículos en la actualidad?”
“No” respondió Rob.
“¿Tienes unas tijeras?” preguntó Cindy.
“¿Por qué?”
“Porque creo que deberíamos eliminar estos versículos. Si no son ciertos, ya que de todas formas la gente no puede controlar sus deseos, ¿por qué no eliminarlos por completo? De por sí, podemos elegir aquellas partes de la Biblia que queremos creer sobre la pureza sexual, ¿verdad? Dame tus tijeras”, dijo.
“Estás loca”, respondió Rob.
Loca o no, Cindy había dejado claro su punto; la teología de Rob sobre cómo algunas partes de la Biblia no eran verdad (porque la gente no puede controlar sus deseos) tenía inconsistencias. ¿Por qué? Porque, si sus creencias estuvieran basadas en la verdad, se sostendrían en cualquier circunstancia, pero no era así.
Por ejemplo, si el sexo antes del matrimonio estaba BIEN porque aparentemente las personas no pueden no controlarse, entonces igualmente, debe estar bien involucrarse con la pornografía, ¿verdad? Después de todo, la tentación de ver y consumir porno es mucho mayor que en los tiempos Bíblicos.
Como era de esperar, cuando Cindy le preguntó a Rob si estaba bien ver pornografía, su teología cambió. “La pornografía no está bien porque perjudica a las personas que la practican y no es muy cristiana.”
¿Por qué Rob tiene una visión inconsistente de la pureza y de los mandamientos de la Biblia?
Además, si algunos versículos de la Biblia se consideraran falsos porque la gente no puede controlar sus deseos, entonces también tendríamos que eliminar los mandamientos sobre robar, mentir, engañar y tener relaciones extramatrimoniales.
Claro que había agujeros en la teología de Rob que sostenía el sexo-antes-del matrimonio, al igual que habría agujeros en la Biblia de Cindy si la cortara.
¿Pero incluso el sexo prematrimonial puede producir intimidad?
Durante sus discusiones sobre el sexo prematrimonial, Rob insistía en que era bueno que una pareja tuviera sexo porque “los acercaba más”.
Cindy creía que esto era cierto, pero al mismo tiempo no. Por un lado, la Biblia dice que el sexo hace que “dos personas se conviertan en una”. Por tanto, es algo más que un acto físico, es también un encuentro espiritual (Marcos 10:6-9).
Además, la Dra. Patricia Love, autora de The Truth About Love (La verdad sobre el amor), escribe que la sensación de intimidad se crea mediante un “cóctel químico” que se produce en el cerebro durante el acto sexual y perdura en cada uno hasta 24 horas después de tener intimidad. Quizá sea a este vínculo fisiológico al que Rob se refería.
Por otro lado, tener relaciones sexuales no garantiza que se desarrolle la profunda intimidad emocional que todos anhelan.
Alice Fryling, en un artículo titulado “Why Wait for Sex?” (“¿Por qué esperar para tener sexo?”) escribe:
“El sexo genital es una expresión de intimidad, no el medio para conseguirla. La verdadera intimidad surge de la comunión verbal y emocional. La verdadera intimidad se basa en un compromiso de honestidad, amor y libertad. La verdadera intimidad no es principalmente un encuentro sexual. De hecho, la intimidad no tiene casi nada que ver con nuestros órganos sexuales. Una prostituta puede exponer su cuerpo, pero sus relaciones no tienen nada de íntimo”.
Algunos expertos afirman incluso que el sexo prematrimonial hace un cortocircuito en el proceso de vinculación emocional. Donald Joy, escritor de Christianity Today, (El Cristianismo de hoy) citó un estudio de 100.000 mujeres que relacionaba “el inicio temprano de las relaciones sexuales con la insatisfacción en sus matrimonios actuales, la infelicidad con el nivel de intimidad sexual y la prevalencia de una baja autoestima”.
¿Qué significa esto? Si Rob estaba intentando convencer a Cindy, o a cualquier otra mujer, de que el sexo beneficiaría su relación, ella debería pensar bien antes de dar su consentimiento. Aunque el sexo prematrimonial produce un cóctel químico de corta duración en el cerebro, no hay garantía de que vaya a producir un acercamiento emocional o una satisfacción relacional a largo plazo.
¿No puede el sexo prematrimonial ayudarte a determinar la compatibilidad?
Rob le dijo a Cindy que no le parecía razonable que ella esperara que él postergara el sexo hasta el matrimonio porque nadie compraría un coche sin probarlo; así que no podía imaginarse comprometerse en matrimonio sin hacer una “prueba de manejo sexual”.
Cuando Cindy sugirió a Rob que su mentalidad de “prueba de manejo” podría llevarle a comparar el rendimiento sexual de su esposa con el de sus otras parejas, él lo negó. “No, no lo haría”, dijo con firmeza.
Sin embargo, su lógica era errónea, y esta es la razón: Si fuera cierto que Rob no habría tenido problemas de comparación, ¿por qué necesitaría “probar” algo? Después de todo, si nunca hubiera tenido varias parejas, automáticamente pensaría que su esposa es la mejor. Por ejemplo, el hombre que nunca ha visto o conducido más de un automóvil no sabe cómo son los demás; por lo tanto, estaría satisfecho con su automóvil.
Las parejas también pueden sentirse amenazadas si creen que su pareja podría estar comparándolas con parejas anteriores.
Cuando Cindy preguntó al azar a 10 mujeres de su trabajo si les preocuparía que su esposo las estuviera comparando con otras mujeres si hubiera tenido relaciones sexuales con ellas antes de casarse, el 80% de ellas respondió que sí.
Esto proporciona un fuerte argumento sobre por qué abstenerse de mantener relaciones sexuales antes del matrimonio puede proteger la seguridad emocional que su cónyuge necesitará sentir en el matrimonio.
Esperanza y restauración después del sexo prematrimonial
Quizás usted se pregunte: “¿Y si, como Rob, soy culpable de pecado sexual?”.
Lo primero que hay que recordar es que ningún pecado sexual está más allá del perdón de Dios. Afortunadamente, Él no niega el perdón ni la gracia a quienes se lo piden. Primera de Juan 1:9 promete que si confesamos nuestros pecados a Dios, él es fiel y justo para perdonarnos nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad. Nota: Esto incluye todo pecado, y no excluye el pecado sexual. El Salmo 103: 12 también promete, ” Llevó nuestros pecados tan lejos de nosotros como está el oriente del occidente.”
Además del perdón, Dios quiere que usted abrace Su gracia que le ayudará a avanzar en la vida y abrazar las promesas que Él tiene para usted con alegría. A pesar de sus elecciones, Dios quiere traerte plenitud relacional.
© 2023 Focus on the Family. Todos los derechos reservados. Usado con permiso. Originalmente escrito en inglés por Shana Schutte y publicado en focusonthefamily.com.
