El famoso médico neurólogo, padre del psicoanálisis, Sigmund Freud, señalaba que los seres humanos suelen tener expectativas conscientes e inconscientes acerca de otras personas y
La cohabitaci?n, en muchos casos, les da inseguridad y desasosiego, legal, emocional y espiritual, especialmente a las mujeres y a los menores.
Cuando se habla de amor conyugal como decisi?n, debe entenderse este prop?sito de resguardar los sentimientos bajo un compromiso de cuidado, atenci?n, de permanencia, de confianza y de estabilidad.
Yo nací en el norte, al lado del mar. Mis primeras impresiones de los sentidos del gusto, el olfato y el oído, saben a sal,
Con el amor no se juega, tampoco es cuestión de suerte; el amor no es ciego, el amor piensa, analiza, razona, y tiene capacidad de análisis.
Con el amor no se juega, tampoco es cuestión de suerte; el amor no es ciego, el amor piensa, analiza, razona, y tiene capacidad de análisis.
Con el amor no se juega, tampoco es cuestión de suerte; el amor no es ciego, el amor piensa, analiza, razona, y tiene capacidad de análisis.
El amor, adem?s de un sentimiento profundo y duradero, implica tambi?n voluntad y decisi?n para estar y permanecer. Es desde esta ?ptica donde se entiende adecuadamente la verdadera y fundamental naturaleza del amor.?
Var?n y mujer tienen la misma naturaleza humana, pero la poseen de manera distinta y complementaria. De manera natural el hombre tiende a la mujer y la mujer al hombre.
Con alguna frecuencia las parejas suelen afirmar que cuando se casan, lo hacen con sus cónyuges, pero que esta decisión no significa casarse necesariamente con
