
Enseñando a los niños a ser agradecidos
Para tener niños agradecidos hay que ser intencionales. Cultivar la gratitud en los niños comienza desde el hogar, mientras nos observan y nos escuchan decir “gracias”.
Para tener niños agradecidos hay que ser intencionales. Cultivar la gratitud en los niños comienza desde el hogar, mientras nos observan y nos escuchan decir “gracias”.
Haga que cada día con sus hijos sea un día memorable. Cada acción que realiza puede contribuir a la salud mental de sus hijos.
Hay una forma práctica en que los padres pueden ayudar a los adolescentes que se sienten atrapados entre la irresponsabilidad de la infancia y los privilegios de la edad adulta.
Dígales estas tres cosas a sus hijos para ayudarles a estar equipados para la vida.
Las decisiones que tome en su vida no tienen por qué ser las mismas que tomó su padre. Puede usar la historia de su vida como un pasaporte hacia otro destino. Puede elegir cómo escribir los próximos capítulos de su historia. Tome la decisión de que el ciclo de padres ausentes termine con usted.
Cuando los padres eligen servir al Señor, vivir consistentemente y aprovechar la oportunidad de estar presentes e involucrados en las vidas de sus hijos, fomentan la identidad y enseñan valores.
Los regalos de un padre, como: tiempo de calidad, palabras de afirmación y acciones positivas, tienen un impacto duradero en las vidas de sus hijos.
Los padres son tan esenciales para el desarrollo saludable del niño como lo son las madres. “Psychology Today” explicó: “La paternidad resulta ser un fenómeno complejo y único con enormes consecuencias para el crecimiento emocional e intelectual de los niños”.
Los padres tienen la asombrosa responsabilidad de poner un fundamento espiritual en el hogar. Pero ¿qué significa eso exactamente? ¿Cómo puede ser el papá que su familia necesita?
Vivimos en un mundo que parece estar obsesionado con resolver problemas destruyendo la vida en vez de nutrirla. Estas 4 ideas le pueden ayudar a formar en sus hijos corazones apasionados por la vida.